El país demanda grandes transformaciones para vivir una vida tranquila, sin temor a enfermarse, envejecer o ser víctima de la delincuencia en sus barrios. Alcanzar estas transformaciones requiere un Estado moderno que facilite la vida a las personas y que sea efectivo y eficiente. No se trata solo de más ayuda, sino de un mejor Estado.

Este mejor Estado debería guiarse por los siguientes principios: a) Estar al servicio de la ciudadanía y respetar la diversidad. b) Acceso a la información pública y facilitar la comprensión ciudadana de los procesos para poder fiscalizar e incidir en las decisiones, cerrando los espacios que permiten prácticas de corrupción y mal uso de recursos públicos. c) Valorar el aporte de los funcionarios públicos y con ellos avanzar hacia la mejora permanente del servicio público. d) Eficiencia, cuidando cada peso para el mejor cumplimiento de sus objetivos. En compras públicas, por ejemplo, urge ampliar la cobertura del sistema, asegurar mayor resguardo de la competencia y establecer mecanismos de prevención de conflictos de intereses, tal como lo ha recomendado la Fiscalía Nacional Económica y diversos centros de estudios. También debe velar por sueldos acordes a la realidad del país. e) Función pública profesional, basada en mérito y excelencia técnica, aislada de los ciclos políticos, libre de nepotismo, y que distinga claramente entre las funciones transitorias de un gobierno y las permanentes de la administración pública. f) Innovación frente a los problemas y capacidad de generar soluciones efectivas, con métodos basados en evidencia y co-creación con los actores más relevantes. Esto requiere un Estado que trabaje junto al sector privado para incentivar inversiones en emprendimientos innovadores para fomentar el crecimiento económico y contribuir a una mejor vida. g) Tecnología y uso inteligente de datos para agilizar los servicios y responder proactivamente a las necesidades. h) Descentralización fortaleciendo los procesos de decisiones en regiones y la democracia.

Tenemos la convicción de que para alcanzar el desarrollo y avanzar hacia una mejor sociedad requerimos de un nuevo Estado. Confiamos en que Gabriel Boric construirá consensos transversales entre todos los actores de la sociedad y liderará un camino con la gradualidad necesaria para asegurar un desarrollo económico sostenible, sustentable e inclusivo. La candidatura de Gabriel representa un compromiso por hacerse cargo del tan anhelado deseo de construir un mejor Estado.

Ahora es cuando.