{"id":1644,"date":"2019-01-23T00:00:00","date_gmt":"2019-01-23T04:00:00","guid":{"rendered":"https:\/\/epublico.zet.cl\/delincuencia-y-migracion-mitos-y-realidades\/"},"modified":"2021-06-13T17:46:17","modified_gmt":"2021-06-13T21:46:17","slug":"delincuencia-y-migracion-mitos-y-realidades","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/espaciopublico.cl\/en\/delincuencia-y-migracion-mitos-y-realidades\/","title":{"rendered":"\u00abDelincuencia y migraci\u00f3n: mitos y realidades\u00bb"},"content":{"rendered":"

Hace algunos d\u00edas se dio a conocer la primera parte de la encuesta de Espacio P\u00fablico-Ipsos denominada \u201cChilenas y chilenos hoy: desafiando prejuicios, complejizando la discusi\u00f3n\u201d, que viene con interesantes, pero a la vez muy preocupantes, resultados en materia de percepciones de la ciudadan\u00eda en relaci\u00f3n a la migraci\u00f3n en nuestro pa\u00eds y, particularmente, en la asociaci\u00f3n que realiza la gente entre este proceso y la delincuencia. Este tema espec\u00edfico ser\u00e1 el foco de esta columna, ya que me interesa contrastar estas percepciones con otros datos emp\u00edricos sobre nuestra realidad y hacer algunas reflexiones sobre esto.<\/p>\n

La encuesta Espacio P\u00fablico-Ipsos cubre tres n\u00facleos urbanos del pa\u00eds (Valpara\u00edso y Vi\u00f1a del Mar; Concepci\u00f3n y Talcahuano, y el Gran Santiago) y se realiz\u00f3 presencialmente a 1.003 personas, siendo su trabajo de campo efectuado entre mediados de noviembre y mediados de diciembre de 2018. Mayores detalles metodol\u00f3gicos y de los otros temas cubiertos por la misma pueden verse en la p\u00e1gina web de Espacio P\u00fablico.<\/p>\n

Un primer hallazgo de inter\u00e9s para contextualizar el tema es que un 43% de los encuestados se\u00f1al\u00f3 considerar que la migraci\u00f3n ha sido da\u00f1ina para el pa\u00eds porque aumentan los problemas sociales (53% en cambio considera que ha sido beneficiosa). Se trata de un porcentaje muy alto si se considera que a nivel discursivo la tendencia natural de la gente es a apoyar afirmaciones que son pol\u00edticamente correctas y esta pareciera no caer dentro de esa categor\u00eda. Por ejemplo, en la misma encuesta, cerca de un 80% de las personas se manifest\u00f3 de acuerdo con la integraci\u00f3n social de barrios y escuelas y menos de un 20% en contra. \u00bfQu\u00e9 nos muestra esto? Al menos que, en materia de migraci\u00f3n, pareci\u00e9ramos tener menos acuerdo o estar mucho m\u00e1s divididos en c\u00f3mo la percibimos y valoramos como sociedad.<\/p>\n

A pesar de lo delicado de este primer aspecto, lo m\u00e1s preocupante, en mi opini\u00f3n, surge al ver las respuestas que las personas dan frente a la pregunta de las preocupaciones espec\u00edficas que genera la llegada de migrantes al pa\u00eds. La m\u00e1s mencionada (con un 59%) y considerada m\u00e1s importante (con un 37%) es que aumente la inseguridad, el tr\u00e1fico de drogas y la delincuencia con los inmigrantes. Esto se produce tanto con quienes tienen una visi\u00f3n positiva de la migraci\u00f3n, al estimar que aporta beneficios, como dentro de aquellos que estiman da\u00f1ino el fen\u00f3meno.<\/p>\n

La pregunta natural que surge es si est\u00e1 preocupaci\u00f3n tiene alg\u00fan sustento emp\u00edrico en la realidad. La verdad es que los pocos datos disponibles en la materia tienden a mostrar que no es posible realizar ninguna asociaci\u00f3n entre migraci\u00f3n y aumento de la delincuencia. Por cierto, con la informaci\u00f3n hoy disponible no es posible aislar la variable migrantes para analizar su impacto en las cifras de victimizaci\u00f3n. En todo caso, en la \u00faltima ENUSC disponible (2017) y en el \u00cdndice Paz Ciudadana \u2013 GFK Adimark (septiembre 2018) es posible observar que hay niveles m\u00e1s bajos de victimizaci\u00f3n que en a\u00f1os previos a los que se produjeran procesos de migraci\u00f3n masivos experimentados en el \u00faltimo par de a\u00f1os. Esto sugiere que nuestros problemas de delincuencia no se ven afectados por la migraci\u00f3n o que, al menos, corren por otros carriles muy distintos.<\/p>\n

En ese contexto, un dato interesante es el proporcionado por la Defensor\u00eda Penal P\u00fablica respecto de la nacionalidad de los clientes que atienden. Recordemos que esta instituci\u00f3n presta asesor\u00eda jur\u00eddica a m\u00e1s del 90% de los imputados por cr\u00edmenes o simples delitos en el pa\u00eds y, por lo mismo, sus datos son bastante representativos de la realidad de funcionamiento de nuestro sistema de justicia penal. Seg\u00fan sus estad\u00edsticas del a\u00f1o 2017, solo el 2,5% de los imputados atendidos fue extranjero y entre enero y agosto de 2018 dicha cifra ser\u00eda de un 3%. Para el mismo per\u00edodo se estima que la poblaci\u00f3n extranjera en Chile ser\u00eda de un 4,4% del total de la poblaci\u00f3n (Censo 2017). Es decir, su participaci\u00f3n ser\u00eda proporcionalmente menor en relaci\u00f3n a la de los chilenos en la comisi\u00f3n de presuntos delitos. Esta cifra mejorar\u00eda si hici\u00e9ramos algunas correcciones. Por ejemplo, los datos muestran que el 86,9% de los extranjeros residentes tienen entre 15 y 64 a\u00f1os, edad en que mayoritariamente se concentran las personas infractoras, en tanto que los chilenos ser\u00edan solo un 68,7% en esa edad (Censo 2017). Evidencia adicional de la Defensor\u00eda Penal P\u00fablica mostrar\u00eda que la mayor cantidad de extranjeros involucrados en delitos es en calidad de v\u00edctimas y que un porcentaje importante de los extranjeros imputados (considerando variables como la distribuci\u00f3n geogr\u00e1fica y tipo de delitos imputados) ser\u00edan transe\u00fantes y no migrantes propiamente tal.<\/p>\n

Otro dato interesante lo arroja una encuesta regional de Ipsos dada a conocer a fines de 2017 en la que se preguntaba una estimaci\u00f3n del porcentaje de extranjeros que se pensaba estaban en las c\u00e1rceles. Los chilenos estimaron en promedio que el 21% de los presos eran extranjeros, cuando a la fecha la cifra oficial indicaba que ellos solo llegaban al 3,4% del total.<\/p>\n

\u00bfQu\u00e9 explica la distancia que pareciera existir entre estas percepciones y la realidad? Solo puedo formular algunas hip\u00f3tesis al respecto. Una primera cuesti\u00f3n a considerar es que la seguridad es consistentemente mencionada por diversas encuestas (incluida la misma Espacio P\u00fablico-Ipsos) como la principal preocupaci\u00f3n ciudadana general. En ese contexto, es posible que esta preocupaci\u00f3n se traspase a otros \u00e1mbitos como la migraci\u00f3n y la integraci\u00f3n social de barrios (donde la preocupaci\u00f3n por seguridad tambi\u00e9n aparece como una cuesti\u00f3n relevante en la encuesta).<\/p>\n

M\u00e1s all\u00e1 de esto, observo con preocupaci\u00f3n que el discurso oficial de nuestras autoridades el \u00faltimo a\u00f1o ha puesto especial \u00e9nfasis en asociar la migraci\u00f3n con la delincuencia y la inseguridad y eso podr\u00eda explicar c\u00f3mo esa forma de comunicar ha instalado un prejuicio en el debate p\u00fablico. En efecto, en buena medida, uno de los argumentos que se ha esgrimido para justificar la nueva pol\u00edtica migratoria y la ley que se discute actualmente en el Congreso ha sido el de querer promover una migraci\u00f3n de personas trabajadoras y no delincuentes, sugiri\u00e9ndose de esta forma que tal vez muchos delincuentes extranjeros han ingresado a Chile en los \u00faltimos a\u00f1os. Esa ret\u00f3rica ha venido acompa\u00f1ado de diversas estrategias comunicacionales de alto impacto como, por ejemplo, la transmisi\u00f3n de la expulsi\u00f3n de migrantes condenados por delitos. Esto no parece quedar aqu\u00ed, sino que crecientemente el lenguaje utilizado en el debate p\u00fablico por parte de las autoridades instala im\u00e1genes a\u00fan m\u00e1s dram\u00e1ticas de lo que est\u00e1 pasando. Recientemente, el Presidente de la Rep\u00fablica ha ocupado un lenguaje muy poco apropiado al se\u00f1alar \u201cvamos a cerrar las fronteras con machete a los que vienen hacer da\u00f1o\u201d. La repetici\u00f3n constante de discursos de este tipo tiende a instalar un debate focalizado m\u00e1s en prejuicios y mitos que en lo que las cifras muestran ser\u00eda nuestra realidad. Esto podr\u00eda extenderse tambi\u00e9n a la manera en que medios de comunicaci\u00f3n estructuran su pauta noticiosa en materias de seguridad.<\/p>\n

Como he se\u00f1alado en otras columnas, cuando los diagn\u00f3sticos en materia de seguridad p\u00fablica no tienen base emp\u00edrica, sino que se construyen sobre la an\u00e9cdota o el prejuicio, las ganancias que a corto plazo se pueden obtener son muy menores en relaci\u00f3n a las consecuencias que a largo plazo generan. El famoso dicho de \u201cpan para hoy y hambre para ma\u00f1ana\u201d parece describir muy bien esto. En este caso en particular, me preocupa que estos discursos no solo no hacen ning\u00fan aporte para construir una estrategia m\u00e1s fina en la tarea de reducir el delito y mejorar la seguridad, sino tambi\u00e9n instalan una cultura de desconfianza y temor sobre un fen\u00f3meno social que lleg\u00f3 para quedarse, como lo es la migraci\u00f3n, y con el cual debemos aprender a convivir y aprovechar para desarrollarnos como una sociedad mucho m\u00e1s justa, diversa e integrada. Hoy parecemos estar un poco lejos de eso.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"

\u00ab\u2026Cuando los diagn\u00f3sticos en materia de seguridad p\u00fablica no tienen base emp\u00edrica, sino que se construyen sobre la an\u00e9cdota o el prejuicio, las ganancias que a corto plazo se pueden obtener son muy menores (\u2026) Estos discursos no solo no hacen ning\u00fan aporte para construir una estrategia m\u00e1s fina en la tarea de reducir el delito y mejorar la seguridad, sino tambi\u00e9n instalan una cultura de desconfianza y temor sobre un fen\u00f3meno social que lleg\u00f3 para quedarse\u2026\u00bb<\/p>\n","protected":false},"author":2,"featured_media":348,"comment_status":"open","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"footnotes":""},"categories":[46],"tags":[],"areas_de_estudio":[45],"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/espaciopublico.cl\/en\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/1644"}],"collection":[{"href":"https:\/\/espaciopublico.cl\/en\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/espaciopublico.cl\/en\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/espaciopublico.cl\/en\/wp-json\/wp\/v2\/users\/2"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/espaciopublico.cl\/en\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=1644"}],"version-history":[{"count":0,"href":"https:\/\/espaciopublico.cl\/en\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/1644\/revisions"}],"wp:featuredmedia":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/espaciopublico.cl\/en\/wp-json\/wp\/v2\/media\/348"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/espaciopublico.cl\/en\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=1644"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/espaciopublico.cl\/en\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=1644"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/espaciopublico.cl\/en\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=1644"},{"taxonomy":"areas_de_estudio","embeddable":true,"href":"https:\/\/espaciopublico.cl\/en\/wp-json\/wp\/v2\/areas_de_estudio?post=1644"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}