La semana pasada se conoció que el Ministerio Público estaría llegando a un acuerdo con la defensa del senador Iván Moreira para suspender condicionalmente la causa por el Caso Penta, a cambio del pago de 35 millones de pesos por las boletas ideológicamente falsas que éste habría emitido para obtener recursos para su campaña senatorial.
Cómo olvidar las famosas frases del raspado de la olla o el cupón de combustible. El senador en ejercicio ha sido de los pocos que ha reconocido estas irregularidades y pidió disculpas públicas. Las investigaciones de financiamiento irregular presentan varios problemas.
En primer lugar, al momento de estos hechos las leyes que regían no los consideraban delitos y, por lo tanto, sólo podían aplicarse multas, las que estarían prescritas. Por eso, la mayoría de estos casos se persiguen por las llamadas ‘boletas ideológicamente falsas’ (delito tributario) y no por recibir financiamiento fuera de lo establecido en la ley. Por otra parte, si bien podrían configurarse delitos como cohecho o tráfico de influencias, esto requiere de una mayor investigación.
Por lo anterior, las sanciones a las que se exponen los involucrados son bastante menores y se permiten salidas alternativas, como la que plantea el Ministerio Público. Afortunadamente, a partir de 2016 las cosas son distintas y si volviera a darse un caso así, los involucrados podrían perder el cargo, además de arriesgar una sanción penal por el financiamiento ilegal. En otros ámbitos también ha habido avances en cuanto a sanciones: en el caso de colusión las penas pueden llegar a entre 5 y 10 años de cárcel y las sanciones económicas ahora dicen relación con el beneficio obtenido.
Después de varios escándalos relacionados con delitos de ‘cuello y corbata’, se han aprobado una serie de reformas para que casos como estos no se repitan. Y si ocurren, sean efectivamente sancionados. Quedan materias por mejorar, como los delitos de corrupción. Pero las señales que se están dando para el futuro son positivas, pues hechos de esta gravedad no pueden quedar impunes.