Señor Director:
La independencia de los jueces constituye el principio fundamental que debe asegurarse en la regulación constitucional de un sistema judicial en una sociedad democrática y es, a la vez, un pilar básico del Estado de Derecho. Por lo mismo, me parece debemos examinar con más detención y distancia crítica varias propuestas que han sido presentadas en la comisión encargada de esta materia en la Convención Constitucional que podrían generar un deterioro no deseado en este punto.
Con todo, la propuesta de norma transitoria presentada el día de ayer por un grupo de convencionales según la cual, a partir de la aprobación de la nueva Constitución, todas las y los integrantes de los tribunales superiores de justicia deben ser objeto de una evaluación de desempeño por una única vez, con la posibilidad que se declare la cesación de sus funciones en caso de no aprobarla, constituye un ataque directo y sin sutilezas a la independencia judicial. Ni la Constitución de la dictadura, que pretendemos dejar atrás en este proceso constituyente, contuvo una regla de este calado.
Intuyo que esta propuesta tiene pocas probabilidades de ser aprobaba en la Convención. Sin embargo, su sola presentación, y con el apoyo de un número no despreciable de convencionales, es suficiente para generar enorme preocupación, incluso en personas como yo que hemos visto este proceso con esperanza y optimismo desde sus inicios.