Una vez más el número de nuevos casos de Covid viene subiendo rápidamente, causando alarma y motivando la pregunta de qué se podría hacer para proteger mejor a la población. Aun cuando estamos en una nueva ola con un alto número de casos, la presión sobre el sistema hospitalario ha sido menor que en olas anteriores. Esto se explica porque el virus ha mutado hacia versiones menos letales, la fracción de la población con protección efectiva es alta y se sabe más sobre cómo identificar y tratar casos potencialmente severos. Por estas razones, Espacio Público decidió, a comienzos de diciembre del año pasado, dejar de publicar los informes regulares sobre la pandemia. Hoy tenemos más y mejor evidencia sobre los desafíos que enfrentamos, y estamos mejor preparados.
Una situación menos dramática no significa que debamos olvidarnos de la pandemia. Por el contrario, es importante mantener y potenciar las condiciones que contribuyeron a este nuevo escenario. Hay mucho por hacer.
Un primer elemento es mantener los altos niveles de protección de las vacunas y fortalecer la comunicación de riesgo. El gobierno revirtió un relajo inicial en esta materia, retomando las dos conferencias de prensa semanales del gobierno anterior y dando incentivos potentes para vacunarse al suspender los pases de movilidad a quienes no tienen su esquema al día. Hay que estar atentos a que no vuelva a disminuir el ritmo de vacunación.
Un segundo elemento importante es seguir con las medidas de prevención, como una adecuada ventilación y el uso de mascarillas en lugares cerrados.
El nuevo gobierno instaló la Comisión Nacional de Respuesta Pandémica (CNRP), integrada por expertos diversos, con el objeto de organizar la respuesta a la pandemia, basándose en la mejor evidencia. Esta instancia, que funciona con estándares de transparencia que son bienvenidos, ha mantenido las medidas exitosas del gobierno anterior y contribuido con propuestas novedosas. Por ejemplo, puso de relieve las ventajas de los tests de antígenos como estrategia de prevención y testeo, ventajas secundadas por la ministra en declaraciones recientes, pero aún sin anuncios de medidas concretas al respecto.
Finalmente, es importante despolitizar las vocerías de la pandemia. El liderazgo de la ministra de Salud impulsando la reforma del sector anunciada por el gobierno debilitará sus vocerías en relación con la pandemia. Dar un mayor protagonismo a la presidenta de la CNRP, por ejemplo, contribuiría a una comunicación de riesgo más eficaz en los meses que vienen.